Paradigmas dentro del centro de reparación.

Por: Saúl Nicolás Cruz

 

Existe una manera de hacer las cosas: la de siempre, como siempre.

Cuando los responsables  de la organización sienten tranquilidad en su trabajo, aunque no alcancen los índices correctos de eficiencia y productividad. ¿Por qué cambiar? Si el negocio siempre ha sido así, con sus altas y sus bajas, sobrevivimos. Es aquí cuando se reconoce un paradigma.

 

¿Qué es  un paradigma? Sin ir más allá, paradigma  no es más que un modelo mental que tienden a convertirse en un molde  flexible o inflexible. Pero que incide directamente en las decisiones personales y o en el ámbito del negocio como lo observamos en los párrafos anteriores.

 

¿Por qué hoy en día es importante hablar de este concepto? La pandemia de la COVID-19 ha modificado el panorama laboral del sector reparador. Y es aquí donde  los que  toman las  decisiones de negocio no podrían seguir en un estado de confort.

 

Por que hay un riesgo muy alto. Barry Richmond (1991) mencionó: “El primero de los impedimentos fundamentales para adoptar el pensamiento sistémico, es que estamos atrapados en nuestro marco de referencia. Hoy en día se requiere de parte del  administrador, o  de quien toma la decisión en el centro de reparación de:

 

  • Generar la necesidad de cambiar,  innovar, hacernos competitivos, maximizar el recurso humano para afrontar estos retos. Y para ello debemos eliminar un paradigma muy común en la mayoría de las organizaciones y en este caso de CDR´s, “La resistencia al cambio”.
  • Ante un cambio inminente, tendemos a rechazar salir de nuestra zona de confort primeramente porque es una defensa de nuestra mente ante lo desconocido.

 

Existe otra manera de hacer las cosas: hacerlas mejor cada vez.

 

Para ello debes generar una comunicación estrecha con todo tu personal, que atienda también tu preocupación pero que al mismo tiempo atienda que estas ocupado en buscar soluciones. Adicionalmente deberás marcar  acciones concretas y bien planteadas que de seguro crearan una seguridad y una motivación en el personal.

 

 

Atendamos lo que en algún momento Albert Einstein escribió: “no pretendamos que las cosas cambien, si siempre hacemos lo mismo”.

 

 

 

 

Ante esto algunas recomendaciones para los encargados de los CDR´s son:

 

  • Cambia hábitos no beneficios en el entorno del taller.
  • Toma en cuenta las ideas de tu personal, no te asombres que también conocen el entorno y pudieran salir ideas geniales de ellos.
  • Capacítate remotamente y en igualdad capacita a tu personal en todos los temas posibles.
  • Realiza cambios significativos a tu taller con poca o nula inversión.
  • Mide tus procesos administrativos y operativos

 

Esto con la finalidad de ser competitivos y adaptarnos de una mejor manera a los cambios que se vayan suscitando día tras día.

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