Reparación de vehículos eléctricos
Sin lugar a dudas, la carestía en los combustibles fósiles, los vertiginosos cambios tecnológicos así como leyes ambientales más estrictas, han impulsado a los fabricantes a mejorar tanto los sistemas de propulsión como las carrocerías con nuevos materiales y aleaciones que permitan reducir peso pero a la vez mejorar la resistencia ante un impacto.
No obstante, en la búsqueda de esos materiales idóneos, el tema de la reparabilidad es el que se ve mermado ya que las estructuras automotrices futuras se estarán fabricando de materiales que requerirán de conocimientos y herramienta especializados. A continuación mencionaremos algunos de los materiales utilizados en la construcción de las carrocerías de autos eléctricos del presente:
Fibras Sintéticas
Los materiales sintéticos son fundamentalmente plásticos derivados del petróleo, entre los que encontramos:
- Policloruro de vinilo (PVC). Este es un plástico duro, se ablanda y deforma a baja temperatura, teniendo una gran resistencia a los líquidos corrosivos, por lo que es utilizado para la construcción de depósitos, salpicaderas, tapas de puertas, entre otros.
- Polietileno (PE). Es un plástico incoloro, inodoro, no tóxico, fuerte y resistente a golpes y productos químicos. Posee muchas aplicaciones, por ejemplo: tapas de puertas molduras, fascias, salpicaderas, etc.
- Poliamidas (PA). Puede presentarse de diferentes formas aunque los dos más conocidos son la rígida y la fibra. En su presentación rígida se utiliza para fabricar piezas transparentes como en el caso de los faros y las calaveras.
- Polipropileno (PP). Es opaco y con gran resistencia al calor pues se ablanda a una temperatura más elevada (150 ºC). Es muy resistente a los golpes aunque tiene poca densidad y se puede doblar muy fácilmente. Se emplean en la fabricación de fascias, carcasas de baterías y similares.
- Policarbonato. Es amorfo y transparente, aguanta una temperatura de trabajo hasta 135 ºC, y tiene buenas propiedades mecánicas, tenacidad y resistencia química. Se utiliza en electrotecnia, aparatos electrodomésticos, piezas de automóviles, luminotecnia, cascos de seguridad.
Procesos de reparación en plásticos
- Soldadura química. Los plásticos son reparados por diferentes métodos como la soldadura química, en la cual se aplica un poco de acetona o cloroformo industrial para hacer una solución y así unir las piezas rotas. Cabe señalar que el proceso químico no todos los plásticos lo aceptan.
- Soldadura homogénea. Método por el cual se unen mediante calor las piezas termoplásticas con aportación de material de las mismas características.
- Soldadura autógena. Proceso con el que se llega a la temperatura de fusión del material plástico fundiéndolo de tal manera que se vuelve a unir. Cabe decir que este procedimiento solo es posible si la pieza no perdió material.
- Unión mediante adhesivos. Consiste en la aplicación de productos adherentes muy resistentes los cuales se recomienda principalmente en la reparación de piezas de plástico termofijos ya que su composición no permite los métodos mencionados anteriormente.
En síntesis, los plásticos actuales son utilizados principalmente para la estructura exterior pudiéndolos combinar para obtener mejores propiedades mecánicas, pero la parte central de la carrocería debe de estar forzosamente construida por un metal los cuales tiene mayores prestaciones que un plástico.
Procesos de reparación en metales
Acero. Es el material por excelencia utilizado para la construcción de las carrocerías de los automóviles. Esta aleación se puede unir por medio de las soldaduras de microalambre, por puntos por resistencia, láser y autógena que es la menos recomendable.
Aluminio. Es un metal ligero, resistente a la corrosión y a los productos químicos. Tiene diferentes métodos de reparación la unión por medio de soldaduras especiales de los tipos MIG Braizing, TIG o unión de adhesivos estructurales.
Estos materiales se siguen utilizando en la construcción de carrocerías de autos de combustión interna, pero hay que tomar en cuenta algunas consideraciones al reparar vehículos eléctricos, ya que estos cuentan con una alimentación de corriente directa la cual presenta un riesgo de sufrir una descarga eléctrica si no se tiene un procedimiento adecuado para su reparación, ya el técnico puede sufrir lesiones por la falta de conocimiento de cómo actuar ante una tecnología tan novedosa.
Recomendaciones para iniciar una reparación
Antes que nada identifique los interruptores de bloqueo de la alimentación de las baterías. Utilice guantes y botas que soporten alta tensión al momento de manipular las mangueras naranjas las cuales son de alta tensión, identifique si no existen elementos eléctricos que estén en contacto con la carrocería la cual podría generar alguna descarga en el operario o a la propia computadora del vehículo ocasionando un daño a la misma o la activación de sistemas de seguridad pasiva como las bolsas de aire.
Incursión de los vehículos eléctricos en México
Por el momento en México solo se comercializa el Nissan Leaf como un vehículo 100% eléctrico y que haya sido probado y avalado por centros de investigación como el EuroNCAP. También existen otras alternativas en el mercado, sin embargo son vehículos que no cumplen con todas las regulaciones internacionales.
Asimismo, hay algunos vehículos circulando y que quizás haya visto, como el Volt de Chevrolet que no es 100% eléctrico, es un híbrido entre combustible fósil y un motor eléctrico; el nuevo CR-Z de Honda también es un híbrido; el Toyota Prius que cuenta con varios años en el mercado o el Mini-E, de los cuales solo 20 circularon por las calles ya que fueron proporcionados a diversas instituciones: UNAM, IPN, AMIA (Asociación Mexicana de la Industria Automotriz), personalidades, agencias gubernamentales y medios de comunicación, para poder obtener experiencias de comportamiento del ajetreado modus vivendi de la jungla de concreto.
Infraestructura instalada
En la capital mexicana ya existen diferentes puntos donde se pueden recargar los autos eléctricos para que la movilidad no sea un impedimento por falta de la recarga de las baterías, pero esto no es una garantía de que sea una tecnología verde, debido que en su producción ya se generaron ciertas cantidades de contaminantes lo que se conoce como la cadena o huella de carbono, donde los procesos se tuvieron que quemar hidrocarburos en la fundición de los plásticos, y los metales, la generación de piezas así como las propias baterías que alimentan a la propulsión del vehículo.
Precios
En cuanto a los precios, en el mercado nacional están disponibles a un costo no menor de los 300 mil pesos, aunque el objetivo es ahorrar en combustible y en reducir significativamente la contaminación ambiental.
En conclusión, los vehículos eléctricos que entrarán al mercado mexicano tendrán similares o mejores niveles de confort que algunos competidores, pero procesos de reparación serán los mismos que los convencionales que actualmente existen.
